jueves, 30 de abril de 2009

La pandemia mediática


Un fuerte virus influenza A H1N1- ahora también llamada gripe americana- ha causado, de manera inmediata, una suerte de histeria colectiva. Un pánico generalizado mundial. Los resquemores por las teorías del fin del mundo vuelven a aparecer y las gentes, desprevenidas, desfilan por las calles con sendas mascarillas, que ocultan sus rostros dubitativos, llenos de incertidumbre por no saber lo que puede suceder más adelante.

Es cierto. No estamos en condiciones de subestimar a esta enfermedad, que parece ya haber insertado el terror a las personas. Pero tampoco es para exagerar, para entrar en ese laberinto de pánico. Ni blanco ni negro. Aquí el matiz juega un rol importantísimo: la información veraz es la prevención del caso.

Supuestamente, es en este contexto donde los medios deberían cumplir con su chamba. Informar a la población lo que está sucediendo, lo qué está pasando: las 5 preguntas. Informaciòn del virus para dummies: what, who, where,when, why. Sin ideologías, ni creencias politiqueras, solo información pura y vital. Pero justo aquí, los medios hacen todo menos eso: una desinformación propagadora de pánico. Desafortunadamente, hay que rebuscar esa información útil en esta coyuntura. Cito a la BBC, al respecto sobre una posible comparación con un virus que se propaló en la segunda década del siglo XX:

"Tal como señala el doctor Webster, esto tiene paralelos muy preocupantes con la peor pandemia de gripe que ha azotado al mundo, la de 1918, causada por la cepa H1N1 del virus de influenza.

"Esta situación es muy similar a la gripe porcina -o gripe española- de 1918 que afectó a la población joven adulta".

Los expertos afirman que quizás es prematuro comparar la situación actual con esa pandemia que mató a decenas de millones de personas en todo el mundo.

Pero tal como señala el virólogo estadounidense, "es difícil no comparar ambas situaciones pero la gripe española se desató con el H1N1, y éste es el H1N1; la gripe española comenzó con cerdos y este brote comenzó con cerdos; así que desde el punto de vista científico no podemos evitar la búsqueda de paralelos en ambas situaciones".


En nuestro país- no podía ser la excepción- los medios no han estado acertados del todo para informar. Uno de los diarios más populares de la capital- El Chino- deja un titular, sorna mediante: !YA FUIMOS! Pero, fue el lunes de esta semana que el mismo tabloide se destapó con la siguiente portada: PLAGA TRAE EL FIN DEL MUNDO. Gripe de cerdo es la última pandemia del apocalipsis.



El kiosko ha estado repleto de portadas alarmistas, llenas de generalidades que desaciertan en informar y solo azuzan el miedo en las personas. Consecuencia de ello, el precio del pollo ha subido y el pobre chancho bajó. Las mascarillas se venden por montones: desde cincuenta céntimos a siete soles. Los mayoristas se frotan las manos al adelantar su agosto. El ministro de Salud se equivoca al pronunciarse sobre la posible infectada, ciudadana argentina, que, por emergencia, tuvo que aterrizar en nuestro país. Y, por supuesto, todos los medios recogieron la noticia, desmentida recién al día siguiente. En México, principal país afectado, las medicinas y servicios básicos como el agua han incrementado notoriamente su precio, entre otras cosas más.

Por favor, creo que algo más de respeto se merece la gente. No intento hacer un llamado a la conciencia. Es simplemente un llamado de responsabilidad y de ética al informar. Por lo pronto, cito a la agencia AFP en uno de sus últimos despachos en estas horas:

"Todos los países están mucho mejor preparados que hace 5 años, cuando la primera alerta por la gripe aviar", señaló la directora de la OPS, Mirta Roses, durante una sesión especial en la Organización de Estados Americanos (OEA) sobre la gripe porcina (...) todos los países de la región han actualizando los planes contra la influenza desde 2004, con planes probados, con simulacros, con fuerte capacitación de personal", dijo Roses."

América Latina y el mundo puede respirar algo más calmada, a pesar de todo este alud de falsetes informativos. No subestimar la enfermedad ni irse al otro extremo: el punto medio consiste en prevenir. No hay que descartar nada.

viernes, 24 de abril de 2009

Aldito M. sale del clóset


Aldito M. ya no sabe qué hacer para subir las ventas de su diario. La apelación a su racismo no puede ocultarse más. Y, si bien es cierto, que la nota periodística de Correo de ayer obedece a una lógica de su mismo director, esta no deja de ser menos deleznable.

Esta vez, la diatriba fue contra la congresista nacionalista Hilaria Supa. Una mujer quechuahablante, quien tiene como segundo idioma el castellano. Un castellano no exento de motosidades e imperfecciones, que son propias de una segunda lengua aprendida no por una política de estado que tenga a la educación como factor incluyente e integrador, sino por sus propios medios. Autodidacta por necesidad. Por sobrevivir en la capital, debido al abandono y la ineficiencia del Estado.

No voy a hablar si la mencionada congresista merece su curul o no (Su currículum, al menos, deja en jaque a varios personajes de otros partidos). Tal juicio, en todo caso, sería para todos los congresistas. Varios otros letrados conocidos que pululan el Salón de los Pasos Perdidos, con los hombros inflados y terno para la foto, se van en faenones y aceitadas;son del todo amorales para escurrirse en diversas bancadas y formar alianzas ad hoc hoy por ti mañana por mi: cómo es.

El mismo Aldito M. no tiene coherencia alguna en sus columnas, en la misma conjugación y articulación de frases, muy aparte de como ya mencioné sus otroras frases hirientes salpicadas de racismo y discriminación por montones. Así y todo, es director de un medio de comunicación. Por otro lado, Fritz Du Bois de Perú 21, renombrado economista por las élites limeñas, tiene sus horrores en su columna diaria. La Primera se encargó de desnudar aquellas faltas que abundaron en las líneas del economista.

Aquí un fragmento:

"Lo que Fritz Du Bois escribió sobre educación, en su editorial del viernes pasado, acentúa nuestra preocupación por la crisis educativa en el Perú, si la escritura del director de un diario que se presume serio fuera –como debe serlo- un indicador más para hacernos un juicio al respecto. De hecho, resulta impresionante que en tan breve espacio, empezando por el mismo título, pueda desplegarse tal cantidad de desaciertos lógicos y gramaticales de orden elemental. Dice el título: “La aspiración por (sic) la educación”. Es de suponer que si no se refería a “aspirar” algo, en tanto inhalar, en cuyo caso, ciertamente, ocurre “por” (p. e.: “por” las fosas nasales… ¡Dios nos libre!), lo que habría querido decir es: “La aspiración a la educación”. Aspiramos, por tanto, a que corrija tal error, al menos en el título." El resto de la columna, aquí.

Y nadie le dice que use Coquito.



Lo grafica bien Heduardo. Por Dios, qué verguenza sentiría el recordado y añorado Amauta.

Lo que se pone en relieve no es un juzgamiento por quién maneja un léxico más o menos florido, ni mucho menos de moralina. Lo que se trata es el respeto a la integridad de la persona. Y eso es algo que Aldito no aprende, debido a su visión del Perú, la cual comienza en Dasso y termina en el Jockey Plaza.


La última caricatura, obra y gracia de Álvaro Portales.

viernes, 17 de abril de 2009

¿Ya no?







Vamos por partes, tratando de dejar de lado la indignación que produce comentar noticias como estas. Después del receso de los feriados por Semana Santa, el kiosco volvió con las portadas llenas de horror y sangre. Los fallecimientos de siete escolares y dos maestros en Ayacucho, en el pueblo de Cora Cora. Mientras tanto, en la Panamericana Sur, en el distrito de Cañete, veinte personas se agregaron a la lista interminable de accidentes de tránsito: un choque de un bus interprovincial con un camión cisterna originó una fuga de gas, llegando a producir llamas de hasta los 800 centígrados de temperatura dentro del ómnibus. La seguidilla continúa. Tolerancia cero es coherente. Tolerante con el incremento de muertos día a día, digamos.


La cifra no se detiene. No tiene misericordia con los, sobre todo, menos protegidos. Aislados por una política de estado que prioriza todo menos un equilibrio para las mayorías, para no hablar de justicia social, ya que eso apelaría a un largo plazo que este gobierno, al parecer, no tiene la capacidad de ejecutar. Tolerancia cero.


Nota aparte.

Cuando el accidente automovilístico de Ugaz, no se mostró siquiera una foto. El espíritu de cuerpo se hizo presente en la prensa y hubo poco o nada de autocrítica. La portadas de los niños fenecidos al instante son la paradoja de las diferencias sociales. Por qué no en el caso de Alvaro y sí en el de los niños? Una historia de nunca acabar, mientras las autoridades se pasan la pelota. Nadie es capaz de tomarla. A García solo parece preocuparle el desaceleramiento de la economía del Perú en febrero último: sus lobbistas le ruegan. Fritz Du Bois entre ellos, mientras baila con la Aljovín en el Club Nacional. Deleznable mas no sorprendente.


Con respecto a esto último, dos interesantes links vía El Blog del Morsa, sobre la complicidad de tema de los accidentes de tránsito:

- http://www.elmorsa.com/2009/04/15/prensa-gore/

- http://www.elmorsa.com/2009/04/17/carta-prensa-gore/

-Por último, un periodista hace mea culpa del tema Ugaz.


¿Ya basta con los accidentes no? ¿Autoridades, las pilas no? ¿Ya no?

martes, 14 de abril de 2009

Periodismo no aceitado para dummies

A propósito de la coyuntura y del modo cómo los medios de comunicación se han visto obligados, en su mayoría por sus firmes creencias neoliberales consecuentes del fujimorato ya condenado, a defender el status quo y sesgar la información en desmedro del ciudadano común. En este sentido, la condena al autócrata dejó varias viudas en el periodismo, ahora filtrados, y agazapados en esa nebulosa llamada objetividad. La semana pasada, luego de la condena, los medios de prensa con rezagos fujimoristas son los se robaron toda la atención en el kiosco de la esquina. Utero.pe nos muestra algunas de esas portadas favorables a un Fujimori victimizado.

Ángel Páez, jefe de unidad de investigación de La República- uno de los pocos medios no aceitados por el fujimontesinismo de los noventas- nos recuerda un libro que todo estudiante de Periodismo, en sus primeros ciclos, debe leer: 'Los cínicos nos sirven para este oficio' del gran reportero polaco Ryszard Kapuscinski. La columna de Páez relaciona el tema de aquellas viudas del periodismo que se van reciclando gobierno tras gobierno y nos recuerda cómo este oficio fue tugurizado vía los cleptócratas siameses Fujimori-Montesinos. Ahí les va:

"Uno de los reporteros más respetados del planeta, Ryszard Kapuscinski, solía decía que para hacer periodismo uno tiene que ser ante todo una buena persona, “porque el cínico, la mala persona, no sirve para este oficio”. Es decir, uno debe ponerse del lado de la justicia y la verdad, dos valores fundamentales del ejercicio periodístico. Al dictarse la sentencia para Alberto Fujimori, muchos periodistas que no estaban de acuerdo con el fallo –sin ni siquiera haber leído el texto completo del mismo– salieron del clóset fujimorista para afirmar que la condena era exagerada, injusta o desproporcionada. Hombres de prensa que jamás informaron u opinaron sobre las masacres de Barrios Altos y La Cantuta durante los años duros del fujimorato –y mucho menos contribuyeron con alguna indagación o revelación sobre ambos crímenes– rechazaron la resolución del tribunal presidido por César San Martín no por una convicción forjada en la necesidad de que se conozca la verdad sino en la simpatía o adhesión al ex jefe de Estado, simpatía y adhesión que mantuvieron ocultas a sus lectores, oyentes y televidentes hasta que se conoció la sentencia.

Ese tipo de personas que anteponen sus sentimientos por un reo, renunciando a su obligación de informar a la ciudadanía con la verdad, no son buenas personas y, por lo tanto, son cínicos. Y lo que hacen, aplicando el criterio de Kapuscinski, no es buen periodismo. Es el peor de todos porque embauca, sorprende y miente. Fujimori es un tonto porque gastó dinero público comprando periodistas, cuando había muchos que le profesaban pleitesía. "


Mi visión sobre el periodismo -aunque idealista, pero no por ella, menos verosímil- es la de no caer ante las presiones del libre mercado o cualquier afinidad política que resulte en desmedro de la mayoría. La información pura y dejando una postura en claro. En todo caso, la variedad de puntos de vista en un kiosco siempre es saludable: en democracia, el debate es bienvenido.

domingo, 12 de abril de 2009

Algunas reflexiones después del juicio del siglo

Luego de la condena al ex dictador Kenya Fujimori, quedan varias constantes, varias preguntas por resolver, algunas dudas no exentas de dificultad en cuanto a su respuesta, mas sí una sensación de seguridad en cuanto a una nueva era. Aquí algunas ideas y reflexiones post juicio.

1.- Nueva etapa. Un nuevo espacio de debate se abrirá a partir de esta condena. De cualquier tienda o afinidad política, el miedo se perderá para él diálogo sobre temas que han estado debajo de la alfombra de nuestros propios temores. La condena en sí es el cierre para las personas que lucharon y marcharon en las calles, a pesar de la indiferencia de las autoridades y de la mayoría de peruanos, que evitaban por todos los medios inmiscuirse en el tema. Ahora, la sociedad en conjunto le toca abrir el tan postergado debate público.

El concepto de ciudadanía y democracia se valorará como consecuencia, y las heridas irán cerrando. No habrá memoria selectiva y las próximas generaciones sabrán que un ex presidente fue condenado por sobrepasar la ley, además de pisotearla constantemente. La importancia del juicio, y la condena por crímenes de lesa humanidad, es importante no en cuanto a la duración de esta, mas sí la culpabilidad. La marca registrada de que nadie puede imperar en tiempos de democracia.

2.- Contra el miedo. El miedo y el concepto del terror sembrado en la sociedad es una idea gringa implantada desde los gobiernos de Reagan, Bush I y II, entre otros, quienes imponían sus políticas gansgteriles sin sujeciones a la ley y mucho menos a la población. Fujimori incorporó, desde sus primeros días de gobierno, con Montesinos, el miedo a las personas, y decirles que algunos crímenes se tenían que justificar en aras de una pacificación del país. ¿Acaso el territorio peruano es un campo de guerra?

Los remanentes fujimoristas desperdigados en los medios de comunicación y en empresas, añorantes de un neoliberalismo ciego de las necesidades de la población, intentan menospreciar la condena. Desde el tiempo de la condena hasta un indulto de parte del presidente García, los argumentos de esa derecha, que se resiste a creer que uno de sus líderes haya sido condenado, la relativización del veredicto resulta queja de alumno primarioso. Esto, si tenemos en cuenta, que desde los primeros días del juicio, nunca se pronunciaron en contra del tribunal- San Martín, Prado y Príncipe- que lo interrogaba. Al fujimorismo se le acaban las cartas, si es que ya no se le acabaron.

El indulto y el perdón presidencial son parte de la artimaña fujimorista para insertar el miedo. La relativización como arma del olvido. La condena, al menos los libros nos harán recordar de manera constante y sonante. El culto al miedo se agrieta cuando la democracia funciona, no exenta de algunas imperfecciones claro está.

3.- ¿Terrorismo vencido? ¿Cuál? Unas de las grandes defensas de Fujimori es la idea de la pacificación del país. Abolieron el terrorismo en su totalidad. Por otro lado, hoy nos damos con la noticia desafortunada de 13 militares acribillados. Filas de Sendero Luminoso operan uniéndose al bando del narcotráfico en el interior del país. La política de estado, por su parte, no combate con eficacia la inseguridad que causan aquellos bandos. Mirko Lauer ofrece una visión al respecto.

"Pero 17 años después SL sigue siendo una presencia en la política peruana. Asesina en la zona del narcotráfico. Gana elecciones en importantes universidades peruanas. Hace esporádicas apariciones en las que se consideran antiguas zonas de influencia. Que no parezca a punto de tomar el poder del Estado no lo hace menos presente. Cuando en su primera campaña reeleccionista Alberto Fujimori ofreció terminar con los remanentes de SL para 1995, sabía de lo que estaba hablando: el capítulo de esa violencia en el país no estaba cerrado, y el fenómeno todavía justificaba una promesa electoral. Promesa que, hoy lo sabemos, no era nada fácil de cumplir.

(...)

De modo que la idea de que fuimos librados del terrorismo en los años 90 tiene que ser tomada con algo de pinzas. Se resolvió la amenaza inmediata, es cierto. Pero una parte importante del problema fue potenciada y pateada hacia adelante. La escalada de bajas en el VRAE, segura y no tan lenta, es una clara demostración."

Fujimori nunca derrotó al terrorismo. Hace dos años lo dije en este espacio, sin el ánimo de descubrir la pólvora. Hoy lo reafirmo. Se exige, por lo pronto, una mejor política de estado para combatirla cómo no.

4.- Atención, sociedad civil. Atención con las futuras argucias del fujimorismo que pretende amedrentar a la población. Es por eso, que los diversos gremios y activistas sociales, junto con la sociedad en general, no deben pestañear ante las movidas de la portátil ahora liderada por Keiko, Raffo,Cuculiza y Kenyi (vaya portátil). El reto empieza, y no acaba, con esta condena. Los jueces ya hicieron su chamba. Le toca a la sociedad civil vigilar que esta se cumpla. !Democracia strikes back!

miércoles, 8 de abril de 2009

Simplemente Muchas Gracias


Hugo Príncipe, César San Martín y Víctor Prado, tribunal que dictó la sentencia.


Yanet Carazas Garay, ahora más conocida como la tía 'Sí lo está', la relatora de la sentencia del ex dictador. El culto hacia ella le ha dado un surtido grupo de fans en Facebook. Qué tal chamba: mil horas y solo seguía hablando Sí lo está. A ella, hay que también incorporarla dentro de un plan de reparaciones.


José Peláez y Avelino Guillén, fiscal supremo titular y suplente, respectivamente.


Abogados de la parte civil: Ronald Gamarra, Gloria Cano, David Rivera, David Velazco y Antonio Salazar.


!GRACIAS TOTALES!


7 de abril: Día histórico mundial.

No creo poder encontrar una hilada, y coherente, articulación de frases y expresiones para expresar mi sentir sobre la condena. La sentencia de 25 años al ex dictador dejará absorto a propios y extraños por muchísimo tiempo.

Mi rostro se encuentra rostizado, producto de haber estado en medio de un sol abrasador - que dicho sea de paso, no menguaba en los ánimos de las personas que, esperanzadas, se habían dado cita para ver justicia en vivo y en directo por más de cuatro horas acompañando a diversos gremios y activistas sociales. La DIROES, en el distrito de Ate, fue el lugar donde se le dictaría sentencia al ex mandatario.

La alegría cuando la voz del juez César San Martín dictó la duración de la condena resultó inexpresable: imposible de describirla, muy a pesar de la generosidad linguística que puede otorgar para tal cometido.

Estas absortas palabras no tienen ni el más mínimo punto de comparación con la tranquilidad de los deudos de Barrios Altos y La Cantuta cuando escucharon la esperada sentencia. A ellos, hay que hacerles un monumento a la perseverancia, a la lucha y la constancia. Qué tal chamba la que se metieron tras 17 años de salir a las calles a protestar, a quemar sus gargantas por algo que solo ellos creían. Qué tal paciencia y sobre todo, qué tal mesura para, en ningún momento buscar venganza ni alguna revancha, pese a lo duro e injusto que significó perder a sus familiares absolutamente inocentes. A ellos, repito, es imperioso hacerles un monumento.



Por último, el triunfo de la justicia sobre los métodos retrógradas autoritarios y déspotas significa una nueva era en la jurisprudencia mundial. Nadie está por encima de la ley. El fin no justifica los medios. Y el Perú dio la voz de alerta. Qué orgullo carajo.

domingo, 5 de abril de 2009

Culpable: La historia dictó sentencia


Se cerró el círculo. La condena al ex dictador Alberto Kenya Fujimori Fujimori se dictó para agrado de unos e infortunio de otros. La historia dictó sentencia y, con ella, un gran precedente ante el mundo entero.

25 años es la duración de la condena, y, aunque la apelación de parte de la defensa de Fujimori, la sentencia ya es un hecho simbólico. Una gran enseñanza, sobre todo, para nuestras futuras generaciones.

La opinión de este blogger está demás, ínfima, ante el impacto de este hecho. La justicia comienza a sonar en la frecuencia modulada de nuestro país. Que se empiece a hacer costumbre.

Tres de Ripley


A menos de 24 horas para la condena al ex mandatario Alberto Fujimori, me dio curiosidad dar un vistazo al sector que se opone a la sentencia. Tres ejemplos de trastes distintos pero que llegan al mismo acuerdo: la no condena a su Chinito. Para su (mala) suerte y desafortunado pronóstico, la gran parte de la población ya dio su veredicto con respecto al juicio, según la última encuesta de la Pontificia Universidad La Católica (PUCP). La culpabilidad como sentencia: un 64 % cree que es culpable de violación a los derechos humanos.

A estas alturas, la defensa de Fujimori es una suerte de bluf, un blooper visto por enésima vez, un chiste mal contado que nos pretendiera agarrar desprevenidos. Ahí les va.

Uri Ben Schmuel (¿Diario? La Razón) : "La argolla mediática progre ha olido sangre y ya no le basta con una condena a Fujimori. Este domingo anticipó lo que se viene para los próximos meses, según se desprende de las opiniones de sus testas coronadas: el fujimorismo es una amenaza para la democracia, un movimiento totalitario más peligroso que el senderismo y debería ser proscrito. Los mismos que consideran a sus amigos caviares la voz del pueblo, pese a que cuando van a elecciones obtienen menos del 0.5 % de los sufragios, dicen que un partido de 13 escaños en el Parlamento, cuya lideresa obtuvo más de 600, 000 votos en los últimos comicios, no representa a nadie y que los que votaron por esta opción son un atajo de tontos. Curiosa forma de entender la democracia ".

Aldito Mariátegui: " Me he soplado todo el juicio y la verdad es que no creo que se haya demostrado su culpabilidad. Claro que estoy seguro de que Fujimori estaba al tanto de todos los operativos del grupo Colina, pero la acusación no lo ha probado plenamente y no puedes meter preso a nadie con los argumentos -simplificándolos- de "porque era el jefe tenía que saber. Y como jefe militar era responsable de todo lo que éstos hacían".

Y el 'consecuente y no menos lúcido' Jaime Bayly, ayer en su programa: “Yo indultaría a tu padre, no porque lo considere inocente, sino porque creo que, si ya hasta el 2011 estuvo en la cárcel, ya pagó suficiente por sus errores. Si ponemos en una balanza las cosas malas y buenas que hizo, merece un gesto de clemencia por las cosas buenas que hizo al Perú.”

Tres matices que confluyen en el idea anquilosada del fin justifica los medios. La ciudadanía, la democracia no existe en sus mentes. El hecho de que un sector- al que dicho sea de paso me considero afín- como el de una izquierda abierta al libre mercado con participacíón del estado en beneficio de todos sin excepción, no tenga tanto arraigo popular no la invalida de participar en la política, ya que forma parte del sistema democrático. Algo que en las retrógradas mentes autoritarias y déspotas no pueden entender.

En el caso de Keiko Fujimori- quien pelea con relativo éxito las encuestas por estos días- creo que la sentencia será más que un precedente mundial del castigo a los dictadores, una enseñanza a la población, y esta sabrá reflexionar sobre lo que puede pasar si ella se sentara en el sillón presidencial (bueno también si es que cabe). Lo de Bayly, como se menciona en Desde el tercer Piso, es más que deleznable, un desperdicio, una pérdida de alguien que pudo llegar lejos, pero se (auto)estancó en su propio lamento. Por último, lo de Aldito !bah! en fin es Aldito: periodismo gourmet. En todo caso, aquí una manera de respuesta de parte de Gonzalo Gamio, filósofo de la Pontificia Universidad La Católica.

" En lo único en que el alegato de Fujimori coincidió con la estrategia que asumió su defensa fue en la tesis de que no existen pruebas que lo incriminen directamente. Este es un argumento que no funciona en estos casos. Si lo que se busca es un arma humeante con las huellas de Fujimori o documentos firmados y sellados por él ordenando asesinatos entonces tal búsqueda no llegará a buen puerto. Tampoco encontrarán documentos firmados por Hitler y Stalin enviando a personas a campos de concentración o contratando sicarios para asesinar a rivales políticos. Lo que se ha venido probando es la conexión del Grupo Colina con el Ejército y el SIN, y cómo la cadena de mando ascendiía hasta Salazar Monroe – ya condenado por estos casos – Montesinos y Fujimori. Su gobierno felicitó a los asesinos, obstaculizó las investigaciones sobre el tema y amnistió al Grupo Colina. Se trata de la figura del autor mediato. La justicia peruana, además, cuenta con un precedente en el uso de esta estrategia; gracias a ella condenó a cadena perpetua al propio Abimael Guzmán."

Martes crucial


Este martes 7 de abril, nuestro país estará bajo la mirada escrutinadora del mundo entero. Y es que se dictará la tan esperada sentencia al ex presidente Alberto Fujimori, acusado por crímenes de lesa humanidad. Suceso que para propios y extraños resulta aún difícil de creer. No por el argumento de Nakasaki, abogado defensor del ex dictador: que hace quince o veinte años qué se podía enjuiciar a un ex presidente y sentenciarlo; sino por el hecho de que sentará, tras la condena, un precedente mundial. Una enseñanza al mundo de que el poder no escapa hacia los pantanos de la impunidad. Ante la ley, todos somos iguales. Por ello, independientemente de cuánto tiempo lo sentencien en la cárcel, importa la misma condena en sí. La culpabilidad de alguien que lideró toda una maquinaria para imperar obviando las instituciones democráticas y sembrando muerte y corrupción por todo el territorio peruano. Y que todos esos crímenes y una de las peores épocas de la historia del Perú sea inculcada, cuanto antes, hacia los inocentes y párvulos escolares. Como para que no se repita.

A menos de 24 horas, el Perú se prepara para ver la justicia en vivo y en directo...al fin.

jueves, 2 de abril de 2009

A poco de un gran precedente


Al ex dictador Alberto Fujimori, las cuatro pastillas, que tomó ayer durante su defensa, no amainaron su desesperación por querer tapar sus propios horrores, cometidos en la década pasada. Lo del miércoles último no resultó más que una defensa de trinchera: una negación de los hechos que se le acusan por violaciones de derechos humanos. Así pues, el ex presidente- que renució vía fáx en 2001, con el pretexto de ir a la cumbre mundial de países que se festejaba en Brunei, Malasia- apeló a la memoria selectiva, condecorándose como el pacificador del terrorismo. La falacia cliché a la que se aferra, hasta ahora, el fujimorismo. Para colmo, se autodenominó como un heróe tal que debiera ser resaltado, posteriormente, por los libros de historia que futuros escolares leerán en sus aulas. De ser cierta tal profecía, la educación vaya que tocaría el punto más bajo en la historia del país.

Pero, claro, en aras de la democracia y de libertad de expresión que esta implica, resulta innegable como el fujimorismo sigue aún teniendo gran arraigo popular. Cosa increíble por cierto. No en vano su hija Keiko pelea las encuestas para liderarlas. Tampoco que el apellido Fujimori todavía tenga poder (sí cuesta creerlo). Tanto en los medios de comunicación como en los pasillos de los Pasos Perdidos como el Judicial, retumba el fantasma de la década: casi imposible de deslindarse. El silencio de algunas autoridades, por otro lado, no deja de ser otra alternativa de complicidad, no menos maquiavélica, con el fujimorismo.

Por ello, es importante la memoria: un recordatorio constante de lo que fue una de las décadas de más injusticia y más violencia del país, donde un dictador hizo y deshizo el respeto de las instituciones más importantes, dejando así también una grave herida en la autoestima de la mayoría de los peruanos. En este sentido, La República hizo bien en recordar - y desmentir - tal mito de que este pacifista logró con su ingenio la denominada captura del siglo.

"Recordemos: Abimael Guzmán Reynoso, el máximo dirigente de Sendero Luminoso, fue capturado el domingo 12 de setiembre de 1992, a las 8 y 45 de la noche, en un inmueble de Surquillo, en momentos que el entonces presidente de la República Alberto Fujimori Fujimori disfrutaba de un sesión de pesca en un remoto lugar de la selva. Vladimiro Montesinos Torres, su asesor en temas de seguridad al que el mandatario había entregado todos los poderes para combatir el terrorismo, descansaba en su casa de playa del sur de Lima. Ambas autoridades eran ajenas en absoluto al “Operativo Victoria”, que ese día llevaba adelante el Grupo Especial de Inteligencia (GEIN), de la Policía Nacional, y que esa noche alcanzó su objetivo tan buscado. Palacio de Gobierno fue in-formado de la noticia recién a las 9.45 de la noche. El edecán de turno respondió que el presidente aún no había retornado de su excursión a Iquitos."

El mencionado Grupo Especial de Inteligencia fue el artífice de las capturas más importantes de la cúpula de Sendero Luminoso, así como la de su líder Abimael Guzmán. Una verdad que la prensa independiente junto a una oposición reducida trató de difunfir pese las opresión de la dictadura, así como también algún que otro apasionamiento para denunciar tales hechosque hacían perder la verosimilitud en estas. De todas maneras, nada justifica que las atrocidades cometidas sumerjan en la más pasible impunidad.

En otra parte de su alegato, Fujimori mencionó el asesinato del esposo de la congresista Luisa María Cuculiza, quien fuera una víctima más del terrorismo. Investigaciones judiciales de la década de los ochentas en el que fuera asesinado Hugo Rivera dieron a conocer que el autor de dicho crimen fue una persona al que no militaba en algún bando terrorista. La información la trae La Primera:

"En 1999, una rigurosa investigación periodística dio cuenta, mostrando el atestado policial Nº 465-85, elaborado en la ciudad de Huánuco, que el verdadero asesino fue un orate llamado Carlos Espinoza Mautino, quien según el atestado policial, le disparó a Rivero tres tiros en la cabeza. La verdad fue divulgada cuando el supuesto asesinato del esposo de Cuculiza por parte de senderistas fue utilizado por el fujimorismo para apoyar la propuesta del retiro del Perú de la Corte Interamericana de Derechos Humanos, por el falso supuesto de que el referido organismo buscaba liberar miembros chilenos del MRTA. El expediente indica que el crimen ocurrió el 24 de marzo de 1984 y señala que Felisa Mautino, madre del asesino, buscó al esposo de Cuculiza para reclamarle el pago de una mercadería que había perdido como consecuencia de un choque que tuvo contra un camión de la empresa embotelladora administrada por el esposo de Cuculiza."

Aunque el apelativo de orate al asesino del esposo de la congresista fujimorista forma parte de ese inevitable prejuicioso argot periodístico (una caja llena de clichés y frases hechas, por cierto más inevitable)- desafortunado cómo no- le sirvió al fujimorismo, en ese entonces, como pretexto para salirse de la Corte Interamericana de Derechos Humanos.

Si bien es cierto los anteriores presidentes, Belaúnde y García, no pudieron hacerle frente a la lucha contra el terrorismo, así como haber cometido numerosas violaciones a los derechos humanos, el de Fujimori fue el régimen que aplicó una estrategia ad hoc. Una estratagema de una guerra sin cuartel, que no miraba las consecuencias más sí el éxito político que traería. No importaría pues las numerosas víctimas civiles ocasionadas por los Colina boys como por el terrorismo. La idea gringa del fin justifica los medios. La subestimación de las libertades individuales y los derechos básicos de la persona en su máxima expresión.

Solo queda esperar una sentencia que enseñe al mundo entero el gran precedente de castigar a los dictadores. Aunque llena de idealismos y por qué no de alguna ingenuidad, la parte civil y gran parte del país quiere que la justicia llegue, por primera vez para todos por igual.